El Ayuntamiento de Valencia ha solicitado a AENA que los aviones sobrevuelen la ciudad a más de 1.000 pies para evitar las molestias sonoras.
Hasta ahora los aviones cruzaban el casco urbano a 900 pies y los expertos aseguran que el paso de 1.000 a 1.500 pies es muy notable y el ruido es muy inferior. «La solución es muy sencilla y pasa por controlar a las compañías aéreas que respeten las rutas de vuelo establecidas y que se regule la altura a la que deben sobrevolar la ciudad para que el ruido que producen, a mayor altura no suponga una molestia para todos los vecinos», afirmó ayer la concejala de Contaminación Acústica, Lourdes Bernal.
La senda de aproximación al aeropuerto de Manises entra por el mar y recorre el nuevo cauce. Sin embargo, los aviones cruzan todo el casco urbano y a baja distancia para ahorrar gasolina y tiempo. Unas medidas que, según los sindicatos, piden las compañías para hacer más rentables los vuelos.
Pero el Ayuntamiento no está dispuesto a dejar que los aviones sigan cruzando por el centro de la ciudad y aguantar las críticas lanzadas por el delegado del Gobierno, Antonio Bernabé.
La concejala Bernal se mostró ayer sorprendida de que el delegado del Gobierno instara a los vecinos a alegar «cuando hace tiempo los colectivos vecinales de San Antonio de Benagéber denunciaron ante la Fiscalía los problemas que padecen y que todavía no se les ha contestado. Así como la negativa de incorporar a la Federación de Vecinos a las reuniones de AENA», matizó Bernal.
Ante el anuncio del Ayuntamiento de Valencia de presentar alegaciones contra el plan del ruido Peralta recordó que en la celebración de la Fórmula 1 en el circuito de Valencia se «repartieron tapones». «No vamos a llegar en ningún caso a repartir tapones con el funcionamiento de los aviones, ni vamos a contar los ciudadanos de Valencia que van a verse afectados por la celebración de esta prueba porque no es la actividad de esta administración», señaló.
Fórmula 1
Esta vinculación molestó mucho a la concejala Lourdes Bernal. «Se dedica a ironizar con la Fórmula 1 que es una excepción puntual por lo que supone a la ciudad y porque no se puede comparar tres días de incidencias de ruido con 365 días de padecimiento de aviones que sobrevuelan la ciudad», comentó.
Para el Ayuntamiento insonorizar las viviendas próximas al aeropuerto de Manises no es la solución y pasa por controlar las rutas y exigir que se respeten.
Los vecinos más afectados son los de los barrios de San Marcelino, Cruz Cubierta, Malilla, Fuensanta y ahora también los del centro de la ciudad, que hasta el momento no se sentían afectados.
Los vecinos ya están trabajando y estudiando la modificación del mapa del ruido presentada por el aeropuerto de Manises para entregar sus alegaciones.
Los afectados tienen todavía varias semanas para presentar sus alegaciones y reivindicar su derecho al descanso que tanto han reivindicado durante este último año.
De igual forma, el Ayuntamiento ya trabaja en su propio mapa del ruido y está incluyendo los nuevos proyectos como carriles bici y asfaltado fonoabsorbente encaminados en reducir el ruido ambiental. «Todas estas actuaciones se incluirán en el plan que estamos elaborando y que coordinaremos mediante un órgano gestor», afirmó un portavoz de la concejalía.
Valencia fue el primer Ayuntamiento de España en presentar el mapa del ruido. Un documento que inmediatamente recibió la consulta del resto de Consistorios del país y ahora quieren ser los primeros en tenerlo aprobado y poder aplicarlo», afirmaron las mismas fuentes.
Este documento deberá enviarse a la Conselleria de Medio Ambiente para que le de el visto bueno y de esta manera ponerlo en práctica.
Fuente: Las Provincias
Yo creo que los aviones siguen cruzando sobre el casco urbano ¿no? me extraña la impunidad de las aerolíneas…son multadas?