Air Nostrum es una aerolínea valenciana fundada en 1994 y que desde 1997 opera como franquiciada de Iberia, como Iberia Regional. Ha sido, y es, una aerolínea muy importante para nuestro aeropuerto, que ha estado quince años entre las dos aerolíneas con más pasajeros y que siempre ha destacado por la calidad, siendo sus objetivos más destacados el pasajero de negocios y la alimentación del hub de Iberia en Madrid.

Por todo esto es importante nuestro nuevo “flight report”, sobre la ruta a Bilbao de Air Nostrum en clase Business, una de las principales rutas con una frecuencia de tres vuelos diarios (una o dos en fin de semana).

El proceso de facturación es muy ágil, ya que el grupo Iberia dispone de los mostradores de la terminal regional en exclusiva, además los pasajeros que viajan en clase Business tienen su propio mostrador por lo que no se producen esperas.

El billete business da acceso a la sala VIP del aeropuerto, llamada Joan Oliver, y que se encuentra en la unión de la terminal 1 y la regional. Allí podemos relajarnos, leer la prensa, conectarnos a internet o comer y beber algo mientras esperamos la salida de nuestro vuelo.

Los vuelos de Air Nostrum se embarcan por la terminal regional (puertas R) al estar compuesta de aviones regionales en los que se embarca a pie. Esta terminal es muy cómoda para embarcar, ya que los aviones son pequeños y estacionan muy cerca de la puerta. En nuestro caso la puerta R53 fue la que nos llevó hasta el CRJ-1000 que, procedente de Menorca, nos llevó hasta Bilbao. Atrás dejábamos la iluminada “lengua” de la terminal regional para acceder al avión.

Los asientos de clase Business, como es habitual, están situados en las primeras filas. En el caso del CRJ-1000 la clase business se compone de diez asientos. Aunque pueda parecer que en el caso de los aviones regionales no se nota tanta diferencia en los asientos, el caso es que se agradece un poco de espacio extra entre asientos, aunque  sin duda lo que marca la diferencia es el servicio a bordo.

El personal de cabina, siempre atento, nos ofreció la prensa diaria así como las revistas de Air Nostrum e Iberia. Una vez que despegamos nos ofrecieron tanto comida como bebida, acción que repetirían varias veces durante el vuelo, y es que si en algo ha destacado siempre Air Nostrum es por la buena atención de su personal. También existe una nueva carta para la clase turista.

El vuelo fue muy tranquilo, con una buena temperatura en cabina y un ambiente relajado. Sólo dura una hora, por lo que se hace bastante corto y antes de darnos cuenta ya habíamos llegado al moderno y calavatresco, y en ocasiones ventoso, aeropuerto de Bilbao, pero que en esta ocasión nos recibió con un tiempo tranquilo y apacible. El vuelo de vuelta lo hicimos en un CRJ200 con una experiencia de vuelo similar.

Si quieres puedes mandarnos tus «flights-reports» de vuelos desde/a Valencia a info@aeropuerto-valencia.es. ¡Gracias!